Síndrome Hipereosinofílico (SHE)
Trastorno raro caracterizado por niveles persistentemente altos de eosinófilos que causan daño a los órganos.
Explicación General de la Enfermedad

El síndrome hipereosinofílico (SHE) es un trastorno poco frecuente caracterizado por niveles persistentemente altos de eosinófilos en la sangre (hipereosinofilia ≥1500/µL) que causan daño a órganos.
Los eosinófilos, un tipo de glóbulo blanco, proliferan en exceso, se infiltran en tejidos (corazón, piel, pulmones, sistema nervioso) y liberan sustancias tóxicas que provocan inflamación y fibrosis. Se clasifica en formas primarias (neoplásicas), secundarias (reactivas a otras causas como parásitos o alergias) e idiopáticas.
Causas y Factores de Riesgo
El SHE puede tener distintas etiologías:
- Forma primaria (neoplásica): Es una enfermedad mieloproliferativa donde un clon maligno causa la sobreproducción. A veces se asocia a mutaciones genéticas específicas (ej. FIP1L1-PDGFRA) y se considera una leucemia eosinofílica crónica.
- Forma secundaria (reactiva): Ocurre como reacción a infecciones parasitarias, alergias severas, ciertos linfomas o enfermedades autoinmunes (como Churg-Strauss).
- Forma idiopática: Cuando no se encuentra ninguna causa neoplásica ni reactiva tras un estudio extenso.
Es una enfermedad muy rara que ocurre más en hombres, típicamente entre los 20 y 50 años.
Principales Síntomas
Los síntomas varían ampliamente según los órganos afectados por la infiltración de eosinófilos:
- Generales: Fiebre, fatiga, pérdida de peso, sudoraciones nocturnas.
- Piel: Son muy comunes. Erupciones, urticaria, angioedema o picazón intensa.
- Corazón: Es la afectación más crítica. Puede causar insuficiencia cardíaca, fibrosis (endocarditis de Loeffler) y formación de trombos.
- Pulmones: Tos, dificultad para respirar o síntomas de asma.
- Sistema gastrointestinal: Dolor abdominal, diarrea y agrandamiento de hígado o bazo.
- Sistema nervioso: Daño a nervios periféricos (neuropatías con entumecimiento y debilidad) o afectación cerebral.
Métodos Diagnósticos
El diagnóstico se basa en la tríada de: 1) eosinofilia marcada y persistente en sangre, 2) evidencia de daño en órganos, y 3) exclusión de causas secundarias.
- Hemograma: Muestra eosinófilos absolutos ≥1500/µL.
- Exámenes para causas secundarias: Serologías parasitarias, pruebas de alergia y estudios autoinmunes.
- Estudios clonales: Búsqueda de mutaciones como FIP1L1-PDGFRA en médula o sangre.
- Biopsia de médula ósea: Para evaluar la celularidad y buscar clones malignos.
- Estudios de imagen: Ecocardiograma para evaluar el corazón, TAC de tórax para los pulmones.
Tratamientos Habituales
El tratamiento depende de la causa:
- SHE clonal (con mutación PDGFRA): Responde espectacularmente a Imatinib, un inhibidor de tirosina kinasa.
- SHE idiopático o reactivo grave: Los corticoesteroides (prednisona) son el pilar inicial para bajar la eosinofilia y controlar los síntomas.
- Otras terapias: Si los corticoides fallan o no se pueden usar a largo plazo, se usan fármacos como hidroxiurea, interferón-alfa o anticuerpos monoclonales como Mepolizumab (anti-IL5).
- Tratamiento de la causa: Antiparasitarios si hay infección, o tratamiento del linfoma subyacente.
Recomendaciones para Pacientes
- Adherencia al tratamiento y seguimiento: Es vital tomar la medicación y acudir a los controles de sangre para monitorizar los eosinófilos.
- Monitoreo de síntomas: Aprenda a reconocer signos de exacerbación (dificultad para respirar, nuevas lesiones en piel) e informe a su médico.
- Cuidado cardiológico: Dado el riesgo de daño al corazón, siga las recomendaciones del cardiólogo y realice ecocardiogramas de control.
- Buscar especialistas: Al ser una enfermedad rara, es crucial ser tratado por un hematólogo con experiencia.
Estadísticas Relevantes
Epidemiología
Manifestaciones Clínicas
El síndrome hipereosinofílico es una enfermedad rara con una incidencia estimada de 0.036 casos por 100,000 personas en Estados Unidos, aunque la prevalencia real puede ser mayor debido al subdiagnóstico.
La supervivencia ha mejorado dramáticamente desde la introducción deimatinib para casos con mutación PDGFRA/B, con tasas de supervivencia a 10 años superiores al 95% en estos pacientes. Sin tratamiento específico, la supervivencia histórica era menor al 50% a 5 años.

¿Eosinófilos altos y síntomas inexplicables?
El SHE es un diagnóstico raro que requiere una investigación exhaustiva. Si presenta eosinofilia persistente junto con problemas de piel, corazón o pulmones, es necesaria una evaluación hematológica especializada.